¿Cómo nos podemos orientar? # 3

¿Cómo nos podemos orientar? # 3.

Lo más difícil es ser honesto con uno mismo, pues estamos acostumbrados a mentirnos, y a ocultar nuestros verdaderos deseos, y defectos.

Esto tiene que cambiar, primero hazte un diagnostico honesto de ti mismo, de esa manera puedes descubrir tus males, y así poder aplicar la medicina apropiada.

En realidad ¿Qué es lo que deseas y buscas? ¿Ser alguien importante?

¿Tu propio beneficio? En esto tienes que ser bien honesto.

En mi Facebook me han hecho muchísimas solicitudes, y muchas de ellas son Kehilot, cuando empecé hace 20 años nadie me hacía caso, me tildaban de loco y muchos me dijeron que eso era un suicidio espiritual, seguimos adelante, y hoy en vez de llevar una vida, una visión, se ha vuelto algo novedoso, y las Kehilot están saliendo como el popcorn, por donde quiera.

Antes podíamos ver muchas Iglesias llamadas acá Storefronts –fachadas-  con nombres sensacionales, casi una en cada esquina, Y ahora está sucediendo lo mismo, me quedo asombrado, tantas Kehilot con nombres extravagantes, siguiendo los pasos de las denominaciones.

Eso me hace entender que no hemos visto nada, y que seguimos el dicho ¿Dónde va Vicente? Es donde va toda la gente, o el dicho Americano Monkey see Monkey do -El mono ve el mono hace-.

Todo esto agrava más la situación, necesitamos una visión clara con lentes transparentes, cuando veo la palabra Kehilah Amy, comunidad en la Toráh no se está refiriendo a una comunidad local, solamente una de acá, aislada de otra, diciendo que es mejor que la otra, y que las demás están mal, y muchos alegan que son los que llevan las tradiciones judías, negando al Mesías (Meshija -arameo), y cambiándolo por vestimentas extravagantes barbas extravagantes, ritos, y enseñanzas de hombres.

Otros han hecho Aliyáh –retornar- a Israel, creyendo que es cuestión de terreno.


Jaye, ¿dónde dejamos atrás el Shema?, ¿Lo hemos entendido? Ejad nos dice que somos un solo pueblo que no debe haber división, el problemas son las sectas sean judías, cristianas, o mesiánicas, o de cualquier nombre, solo hay un pueblo, y este pueblo nos une el Amor, La Vida, La Luz, y La Paz (Ahaváh, Jayím, Or, Shalom). Nada nos puede separar.

Todo fuera de esto es falso y no vale la pena hacer ningún esfuerzo por esto.

Yahshuah el Maestro (HaMoréh) nos enseñó que no se puede poner vino nuevo en odres viejos, ni remendar vestido viejo con parche nuevo.

““Reaccionemos, por favor párenle””……….Eso no se nos ha enseñado, no es el plan del Bendito Sea -Qudsho Berij Hu-.

Todo va muy mal en la carrera tan desenfrenada que algunos llevan, no les importa llevarse por delante a quien sea y como sea, no ha importado engañar, estafar, mentir, acusar a inocentes, llevarlos a situaciones desesperadas, herir a personas, calumniarlas, enjuiciarlas y muchas otras cosas más.

Yo me separe del mesianismo, del judaísmo, y de todo grupo religioso, pues no son honestos, ni les importa la Toráh, solo ellos y sus intereses.

Algúnos me han preguntado ¿y usted qué es?  Bueno yo soy un Maestro (Moréh) que he venido para ayudar a la humanidad. Pues siempre lo he sido y lo mismo que los Grandes Maestros (Morím Gedolim) no les ha importado el favor de los demás, ni el dinero, ni la fama. Solo cumplir con el orden de Melquisedec –Malki Tzedeq- que es el orden del Ejad engranado en el Olam.

No me interesan grupos, ya lo intente, ¿Que paso? Me siguieron muchos pero no dejaron sus agendas, y solo me utilizaron para lograr sus propósitos, he fundado más de trescientas Kehilot, en todo el mundo muchas están pero en su mayoría bajo ideas dictatoriales de los líderes, no interesados en la visión, más bien en ellos y sus propios intereses.

Soy El Maestro (HaMoréh), como líder que he sido de ustedes como guía y padre espiritual les llamo a Teshuváh, para que El Bendito Sea –Qudsho Berij Hu- pueda lograr su propósito Universal.

Por eso les dije al principio, que nos hagamos un diagnostico honesto y apliquemos la medicina, la Teshuváh.

Este año entramos a un nuevo Universo (Olam Jadash)  es decir a la era del nuevo Adam, El Dawid que nos prometió en Ezequiel –Iejezqel- 34, que vendrá a defender a las ovejas y sacarlas de la esclavitud, y de las aguas turbias y de los pastos pisoteados a un lugar de libertad y bendición.

Esto no se hará con violencia, sino con el Amor (Ahaváh), pues al cambiar de frecuencia, de dimensión, y de luz a la luz de fotones (Nijra a la Or), cambiaran nuestros códigos genéticos y allí veremos la cura, ¿cuál es la cura? La libertad, el rebaño, el Ejad.

Podremos hacer juicio por nosotros mismos, dejar tantas cosas viejas inservibles, para entrar a una nueva etapa, nuestro Sukot, en un desierto donde la mentira no crece, bajo las estrellas que es la unidad  Cósmica. Con todo lo que existe, todo lo que tiene vida en todos los universos (Olamot).

Dejando toda mimética, religiosa o de seres que hemos creado, y todos encontraremos la identidad con el Verdadero Yahshuah El Todo, con la verdadera Toráh sin letras, ni mandamientos raros, esa Toráh está en nosotros, allí están las instrucciones, y el verdadero Maestro (Yahshuah Moréh Tov), del cual somos parte vital y su cuerpo vivo.

Depende de Nosotros cortar, sacar, renunciar, para tener y vivir en Amor Vida Luz y Paz (Jayím, Or, Shalom, Ahaváh).

Dr., Pedro Ortiz. El Maestro – Octubre – 23 – 2012.