Buscando Nuestra Familia

Cuando veo en la línea de luz en la escritura, que tanto Abraham y Jacob al morir, se reunieron a su familia, o a su pueblo, eso coincide con mi experiencia que tuve cuando me operaron de corazón abierto y tuve mi experiencia de haber partido de este mundo y haber llegado a donde estaba mi familia.
Esa experiencia fue muy diferente de varias anteriores, pero en este caso fue cuando encontré mi verdadera función, pues las anteriores fueron etapas como de un aprendizaje para esta última y póstuma labor de mi legado a esta esfera.
Basado en esto tanto Eliyahu como yo hemos buscado e investigado este concepto para poderlo explicar y dejarlo claro en este laberinto de conocimiento.
Hemos encontrado varias palabras para familia:
1: Mishpajah, Puede ser familia, pero también grupos o comunidad, se puede salir, o dejar de pertenecer.
2: Avahutá Familia por naturaleza.
3: Toledot Familias con funciones definidas.
4: Tzevaam Estirpes de Seres y expresiones de vidas universales.
Genesis – Bereshit 10:5. “Conforme a sus familias”. (Pertenencia)
Éxodo – Shemot 6:17. “Por sus familias”. (Herencia)
Éxodo – Shemot 12:3. “Familias de los Padres” (Por relaciones)
Levíticos – Vaikrá 25:45. “Familias nacidas en vuestra tierra”. (Terrenal, Hay varias tierras como Arká, Adamáh Eretz Tziyah, Nehiyah.
1 de Crónicas – Divrey HaYamin Álef 7:40 “Familias paternas”. (Estirpes)
1 de Crónicas – Divrey HaYamin Álef 8:28 “Principales de familias”. (Con funciones definidas).
Hechos – Hitgalut 3:25 “Familias de la tierra”. De Eretz.
Efesios – Efesim 3:15. “Familias de los cielos y de la tierra”. (Del Olamot)
Cuando se habla de Toledot, y Tzevaam. También se aplica la palabra generaciones, y como se aplica también esta palabra por sus Generaciones. Éxodo – Shemot 31 16, Levíticos – Vaikrá 21:17. Ya estos pactos se pasan por herencia a la demás dependencia.
De acuerdo con un pasaje, él Toma venganza, hasta la cuarta generación, y en algunos pasajes hasta mil Generaciones. Éxodo – Shemot 34:7. Y 1 de Crónicas – Divrey HaYamin Álef 16:15, Salmos – Tehilim 105:8. Acá habla del Pacto para mil Generaciones.
Es muy necesario que veamos y tengamos en cuenta que no somos responsables por nuestros actos sino también los de nuestros antepasados.
Esto es injusto, pero así opera la ley de este nivel, pues las maldiciones son a nivel generacionales y nos pueden afectar.
Hay que tener en cuenta que relación familiar tenemos, y en qué familia estamos.
¿Mishpajah, o Avahutá, Toledot o Tzevaam? ¿O eres de las familias de la tierra? ¿O de las Cósmica?
O eres de la Casa del Padre de la familia de las Luces, Mateo – Matay 10:25, al padre de la familia le llamarían Baal-Zebub, Padre de las Luces, Santiago – Yaakov 1:17.
No todas las familias cayeron en el engaño satánico de estos dioses reptiles, pues quedaron en Tabel, Tambien en Arká y Adamáh, el problema son las familias de la tierra donde fueron arrojados a un nivel de esclavitud, Caín y su raza.
Cuando se le dijo a Abraham, en ti serán benditas todas las familias de la tierra. Genesis – Bereshit 12:3. Acá tierra es Eretz.
Y en Genesis – Bereshit 4:14 Dice, hoy me echas de Adamáh y seré extranjero en Eretz, y el que me encuentre me matará.
Tenemos que tener en cuenta que Ya los reptiles habían engañado a los de Eretz de Tziyah y Netshyah, puesto que todo nuestro sistema solar era habitado y se ha puesto como un desierto.
Por eso en esta tercera dimensión o de la Matrix han sido echado miles de seres como los Arcontes, Shedím sin cabezas, Agartes deformes, y muchos más.
Yo no veo que Adám fue echado a Eretz, más bien fue Caín quien se mezcló con las razas terrestres.
Solo que se le prohibió la entrada al Árbol de la Vida (Etz Jaím) y esto lo puedo ver cuando se les quito las tres Sefirot al Árbol de la Vida.
Pero si podemos ver una cosa, que de acuerdo con lo que he podido percibir, acá hay una gran mezcla de razas y de genética de muchos lugares, y lo que es en la carne (Basar), cuerpo hecho por los Anu (los que esclavizan), con esto no se puede hay que ir más allá a la esencia, los seres de Luz.
A nuestro verdadero ser Avahutá, solo así podremos salir puesto que el cuerpo y el ser humano, el alma están super contaminados y hay que negarlos.
Por eso no hay arreglo, ni métodos, pues se nos ha imputado la maldad de antepasados que no tenemos que ver con ella.
Por eso es por lo que tenemos que quitarnos todos esos sellos e implantes, compromisos y trabajar constantemente, vigilando cualquier portal que podamos abrir.
Y así poder descubrir a que familia pertenecemos y que función tenemos que realizar en esta gran tarea final.
Hay otra manera de mirar a la familia, no tiene que ver con lo que se acá se conoce, porque la familia en este mundo esta distorsionada, y la relación no es igual para todos y más aún en los grupos, las familias deciden quien integra y quien no integra este grupo.
Ahí vemos que no hay un genuino despertar, no hay ni un poco de elevación, es un relleno más, para separar a los habitantes y especies universales y los intereses son individuales.
El Maestro – Malfaná (מַלפָנָא) es aquel que integra a las familias, las ayuda a mirar su esencia, a ver su Ser de Luz, y transmigrar hacia su existencia Eterea.
No es solamente una reunión de personas buscando un solo objetivo.
El Maestro – Malfaná (מַלפָנָא) es aquel que ayuda a que las personas recobren su esencia original, y tomen toda la esencia universal, para empezar una vida, conectados a todos los lugares, existiendo en todos los lugares, estando conscientes de todas las cosas y de todas las esferas al mismo tiempo, sin olvidar ninguna de ellas.
Por lo que la Familia – Malfaná (מַלפָנָא) es una proyección hacia el infinito, el Universo (Almá – עָלְמָא) original o primitivo que no conocemos, está basado en la unidad de la familia, en donde todos son indispensables y el trabajo que hacen beneficia a los demás, el interés ya no es personal, siempre se busca el bienestar de todos.
Así conformando una estructura que se conecta una con otra, como una cadena y sus eslabones, unidos trabajando continuamente para cada vez hacerse más fuertes.
Son unidades (Ejad) que se juntan unas con otras, no para el beneficio personal, sino para el beneficio Universal (Almá – עָלְמָא).
Asi convirtiéndose en Seres que trabajan en sincronía, afinidad y armonía, moviéndose en todas direcciones (Gelilim) para abarca todo y no dejar así ningún espacio vacío.
Esto esto hace que sean una Unidad (Ejad) inseparable que no se puede deshacer, ni se puede separar, aquí no existe la dualidad, ni el bueno ni malo, todo es bueno (Tov -טֹוב ) en gran manera, pero en el momento que se rompe, se fracciona el pulso que mantiene a los Seres y familias que es Malfaná (מַלפָנָא) viene la dualidad.
Esta es la procedencia de un Malfaná, alguien que no es mayor a nadie, es igual al principio Universal que sostiene y mantiene el Amor (Ahaváh – אהבה).
Nosotros somos los encargados de mantener el pulso Universal original, quiere decir que somos Tov buenos en gran manera y trabajamos solamente para los demás, y no para los deseos egoístas.
La dualidad es algo que es frecuente en este mundo, el bueno y el malo, romper el principio original Universal que nos sostiene, es decir al bueno que es malo y al malo más malo.
Entre muchas otras, esta es la razón porque tenemos que encontrar nuestra familia y así tomar nuestra responsabilidad en el universo.
Shalom, Shalom.
DR. PEDRO R. ORTIZ EL MAESTRO