En el libro de Mateo – Matay 5-14, nos dice que somos la Luz del mundo – Antun Nuhréh De Almá- אַנתּוֹן נוּהֲרֵהּ דּעָלמָא) la Luz del Olam.
Esto quiere decir que nuestra naturaleza original es la Luz y nuestra forma de vida cotidiana es la misma Luz del cosmos (Almá), nos hace esto parte muy importante de la historia Universal.
Entonces tenemos, destrezas y habilidades sobrenaturales, en otras palabras, podemos hacer lo que se hacía antiguamente, cambiar de forma, desaparecer, iluminar, ser conocedores de toda la existencia, pre existencia, y los sucesos ocurridos a lo largo de millones de años. Por ende, tenemos la solución, para todo lo que nos afecta y afecta al mundo y al Universo, sabemos cómo actuar, cómo ayudar, sabemos lo que tenemos que hacer, y como atraer el Menujá (מנוחה) el placer y la satisfacción perpetua.
Muchas veces a la Luz Or se la trata de describir con las palabras en este mundo, las palabras no relatan lo que es en sí la esencia de la Luz, no es algo que se puede describir físicamente, no tiene ninguna relación con las cosas que se expresan en este mundo, nada se puede comparar a la Luz.
Sin embargo, es nuestra forma de vida interna y es parte muy fundamental para despertar a lo que somos originalmente.
¿Pero quienes somos en realidad, hemos mirado como somos, hemos sido trasladados o hemos despertado a la esencia correcta, estamos ahí? O solamente lo sabemos de una manera intelectual, y en eso basamos nuestra realidad.
La quinta extinción masiva sucedió hace 65 millones de años
aproximadamente, en donde se destruyó mas de el 70% de sus habitantes, pero luego de esto hay un gran vacío que desconocemos, solamente tenemos conciencia de la creación que sucedió hace casi 6 mil años.
Inicia el relato de Génesis – Bereshit, con el Elohim o los Elohim, que miraron que la tierra estaba desordenada (Tohu תֹהוּ) y vacía (Vohu בֹהוּ),.
Tohu תֹהוּ Viene a ser desacomodar lo que ya existía, desordenar lo que estaba bien estructurado.
Vohu בֹהוּ En cambio el vacío, es quitar las cosas que existían en ese tiempo.
No quiere decir que la tierra estaba vacía, lo que sucedió ahí fue otra extinción masiva, en donde no había cielos, no había plantas, no había animales, ni seres vivientes, no había luz, todo fue destruido y exterminado, en donde vemos que un 100% de los habitantes de este planeta fue aniquilado.
La creación palabra hebrea Bará (בָּרָא) no es una palabra ni es una creación, Bará (בָּרָא) es en donde se esconde el secreto de los orígenes de la humanidad en este planeta.
Hay varios relatos sobre la creación, por lo que mencionaremos algunos:
Adamu es creado por los dioses a partir de arcilla, la diosa Nammu modela su corazón de barro y Enlil, el dios atmosférico, le insufla la vida.
En un principio los seres humanos no podían reproducirse, pero más tarde fueron modificados con la ayuda de Enki y Ninki. Por lo tanto, Adapa se creó como un ser humano completamente funcional e independiente.
El relato pone a la creación del hombre en manos de la diosa Aruru, también a partir de la arcilla amasa a la humanidad.
Narra cómo los hombres fueron creados a través de la inmolación de los dioses
Lamga que entregaron su vida a fin de que se creara la especie humana para servicio de los dioses.
Y la creación de Adám por parte de Elohim en el inicio del relato de Génesis.
La palabra Bará (בָּרָא) es un código que explica los dioses que actuaron en el proceso de ensamblar la tierra nuevamente, se inicia con caos, desorden y vacío, por lo que el Adám inicia de esta manera, con falta de experiencia.
Estos son los orígenes de los cielos y de la tierra y los orígenes de la humanidad, pensamos que ese es nuestro origen también, pero la tierra ha sufrido varios cambios, destrucciones e invasiones, que ha distorsionado la verdad de nuestra verdadera esencia.
Hay muchos relatos que describen lo que sucedió, lo que es la Luz, y lo que es su esencia, los podemos aprender, pero lo que necesitamos en realidad es la experiencia (Nisayún – ניסיון) Job – Yov 42:5 De oídas te había oído; más ahora mis ojos te ven, esto es la experiencia (Nisayún – ניסיון) y ahora estamos entrando a una nueva etapa, pasamos del estudio a la experiencia.
La Luz es Ehyéh Asher Ehyéh (אֶהְיֶה אֲשֶׁר אֶהְיֶה) soy el que soy o seré e que seré, eso se refiere a que la Luz es el Todo y que solamente se lo puede describir en el interior, esa es la imagen y semejanza que tenemos con el Bendito Es, él es Luz Or y esa es su esencia, y nuestra esencia física es un cuerpo físico y no es Luz.
Se piensa que nuestra esencia es este cuerpo físico que tenemos y no es así, nosotros somos iguales a él en la Luz y la Luz nosotros la tenemos en el interior.
El cuerpo solamente es un vehículo, un transporte del interior, nuestra verdadera esencia esta en el interior y eso es lo que debemos empezar a despertar, para que el exterior también sea transformado del caos, el vacío al orden Universal.
Cuando dice en la escritura, Vosotros sois la Luz del mundo – Antun Nuhréh DeAlmá – אַנתּוֹן נוּהֲרֵהּ דּעָלמָא) aquí encontramos la palabra mundo, que en arameo se dice Almá (עָלמָא).
Tenemos un problema con las traducciones, por ejemplo, vemos en este caso la palaba Almá (עָלמָא) que se traduce mundo, y conocemos como mundo el mundo conocido o planeta tierra, pero esa es una traducción muy débil y equivocada.
Almá (עָלמָא) quiere decir literalmente Universo, no se refiere Almá (עָלמָא) a mundo o planeta se refiere a Universos de Luz establecidos en nuestro interior, entonces la palabra dice de una manera más correcta, Ustedes son la Luz de los Universos de Luz – Almá (עָלמָא).
Vamos a ver ahí, cual es nuestro verdadero origen, vamos a ver que es lo que somos en verdad, ”Somos Luz – Or” y ese es nuestro verdadero origen, que en este planeta no lo vamos a encontrar, lo que somos en realidad esta en nosotros y lo sabemos nosotros, solamente tenemos que decidirnos abandonar el ego, las Klipot, las cáscaras y decidirnos a avanzar para en verdadero despertar, conoceré como fui conocido.
En el Génesis aparecen los Elohim, Tzevaam, Behemáh, Nefesh Jayáh, Taninim Gedolim, Jayat, Remesh.
Luego aparece Adám, Javá (Eva), Ish (hombre), Ishá (mujer), Zahar (macho) Nekevá (hembra).
Nuestra ciudadanía, nuestra esencia esta en la Luz, entonces nosotros procedemos originalmente del mismo Bendito Es, nuestra esencia de Luz no es de este mundo, es de la Luz de Seter (סטר) la luz de los secretos revelados.
La palabra ciudadanía se dice Abodáh (עֲבוֹדָה) significa, trabajo, labor, obra, tarea, actividad.
No tienen que ver con una ciudadanía como se conoce acá, país, ciudad o del lugar de procedencia, Abodáh (עֲבוֹדָה) tiene que ver con el trabajo que tenemos que desarrollar en este mundo y en los Universos.
Cuando empezamos a despertar, conoceremos todas las cosas y sabremos todas las cosas, se abre la sabiduría interior, y miramos que nosotros y en nuestro ser están escritas todas las cosas y eso es para ayudar a los demás a que conozcan su verdadera esencia.
La Verdad Emet está en nuestro interior en la Luz Or, solamente ahí se puede encontrar la Verdad, en la experiencia.
En la mañana (Boker בֹּקֶר), vinieron truenos (Kolot קֹלֹת) y relámpagos (Berakim בְרָקִים), y espesa nube (Anan כָּבֵד עָנָן) sobre el monte (Har הָר), y sonido de bocina (Kol Shofar ְקֹל שֹׁפָר) muy fuerte (Jazak חָזָק); y se estremeció todo el pueblo que estaba en el campamento.
Este es un ejemplo de las distintas dimensiones que podemos encontrar en la Toráh y a esto justamente se refiere la palabra Kolot (קֹלֹת) mal traducidos truenos, se refiere en realidad a voces y en este caso miramos las dimensiones.
Cada dimensión superior es un nivel de Luz y tiene un lenguaje interno y para cada lugar, se necesita experimentar esos lugares y dimensiones para poder conocerlas.
Ahí viene la pregunta ¿Quién soy yo? Una persona simple y sencilla que solamente tiene que estudiar y memorizarse las cosas, pensando que esa es la verdad o mirar que en nuestro interior esta toda la esencia de los mundos
superiores, que están escritos, pero que lamentablemente al traducirlas al idioma español taparon todas las cosas y las escondieron para que las personas no miren verdadera esencia, ni vean quienes son en realidad.
DR. PEDRO R. ORTIZ EL MAESTRO